sábado, 15 de marzo de 2014

Los últimos días del Imperio Celeste. David Yagüe

Conocí a David Yagüe a través de una amiga bloguera Carol, buscaba lectores para la primera novela de un amigo, y la verdad es que como era periodista decidí apoyarlo. Bravo tango siete. El contratista llegó a mi casa y aún no se porqué la reseña se quedó en la carpeta de borradores, sin embargo prometo una relectura porque falta perfilarla y publicarla antes de que termine el año.

Cuando el autor se puso de nuevo en contacto conmigo para presentarme su segunda novela, recordé que me había sorprendido muy gratamente y decidí aceptarla. Mi relación con Oriente es un tanto difícil, son tan distintas nuestras culturas que no siempre soy capaz de disfrutar de las lecturas. Sin embargo adelanto que fui valiente para adentrarme en esta trama y no lo lamento, porque me ha dado algunas de las claves que buscaba para entender esa relación tan complicada que mantengo con Oriente.

El libro salió a la venta el mismo día de mi cumpleaños, el 13 de febrero y ya por ello le tengo un cariño especial. Llegó a mi casa unos días antes y enfrascada como estaba en dos novelas no pude comenzarla, además me planteé que era algo complicado en los pocos días que había para su publicación hacer una lectura por placer y una opinión coherente y con miga.

En cuanto terminé los dos libros que llevaba entre manos, me sumergí de lleno en esta aventura con sabor oriental, y mucha acción que ha hecho mis delicias los días que ha durado en mis manos, y aunque supongo que esto lo esperáis en la conclusión, os recomiendo su lectura para pasar un buen rato y también para aprender sobre la revolución bóxer, si es un episodio histórico que no conocéis. Sin perder de vista que el autor en una entrevista a reconocido que no es una novela de la revolución bóxer, si no una novela sobre su visión de la revolución bóxer.

El autor:

David Yagüe Cayero nació en Madrid en 1982, es periodista y consultor de comunicación. Ha ejercido su profesión en radio e Internet y actualmente lo hace en el diario 20 minutos. Trabajó en el área de comunicación en varias editoriales, blogs y programas de radio.

Ha sido finalista del concurso de relatos Circulo Rojo en el año 2009. Los últimos días del Imperio Celeste es su segunda novela tras el thriller Bravo Tango Siete. El contratista (2011).

Puedes seguirle en Twitter, Facebook y en su blog davidyague.wordpress.com

Sinopsis:

China, 1900. Un calor asfixiante parece anunciar el fuego de la guerra en el norte del país. Una sociedad secreta, los bóxers, amenaza con acabar con todos los extranjeros de la región, ante la pasividad de la corte manchú y la incredulidad de las potencias occidentales.

En Pekin, un español veterano de guerra de Filipinas y el hijo de un comerciante inglés se ven envueltos en un extraño robo de antigüedades.Mientras tanto, un matrimonio de misioneros británicos sufre el horror de la guerra en una apartada aldea y un mandarín chino caído en desgracia tiene que aceptar una misión imposible al servicio de sus acérrimos enemigos de la corte imperial junto con un aterrador bóxer de rostro deformado.

Los destinos de estos personajes se cruzarán en una trepidante historia de aventuras, de lealtad y ambición, amor y traición, en aquel tórrido y sangriento verano de 1900, en el que el mundo entero contuvo el aliento con la vista puesta en China.

Mi Opinión

Empecé esta novela sin saber muy bien que me iba a encontrar, lo primero que me llamó la atención cuando lo abrí fueron los planos para situarnos en la trama. En primer lugar el Pekin de 1900, a continuación una ampliación del barrio de las Legaciones. Y por ultimo una ampliación de la zona donde se produjo el conflicto y un boceto de la marcha de la alianza. Para mí un buen apoyo a la hora de seguir las aventuras y desventuras de nuestros personajes, que cual pícaros del siglo de oro español no siempre salen bien parados, por no decir que la mayoría de las veces salen mal parados y con más golpes y magulladuras de las que el cuerpo es capaz de soportar.

También os serán útiles las páginas finales del libro, donde encontraréis  el glosario y un índice de personajes que es sumamente útil para encarar la lectura, porque nos encontramos ante una novela coral, con muchos personajes y además en distintos enclaves, aunque es difícil perderse, si que si la lectura se queda estancada unos días puede servir de ayuda, y esto os lo apunto para que no os pase lo mismo que a mí que lo descubrí con la lectura ya finalizada.

Los orígenes

Y ahora nos metemos en harina, cuando comienzo una novela me gusta saber que inspiró al autor para escribir esa historia, porque la sitúa justo en ese enclave, y porque crea esos personajes... y no siempre mi curiosidad queda saciada, aunque puedo decir que esta vez sí. Y la respuesta la da el propio David en una entrevista que la editorial le hizo, y que yo os transcribo.

"Desde que vi por primera vez, siendo niño, 55 días en Pekin me quedé alucinado con aquella historia. Los diplomáticos, los bóxers, los soldados, la corte manchú, la resistencia ante el asedio... Siempre he querido saber lo que ocurrió y he leído cualquier cosa relacionada que haya pasado delante de mí. Con los años, cuanto más leía, más me apetecía escribir una historia de aventuras, de lealtad, descubrimiento, traición, amor y cambio ambientada en aquel lugar y fecha. Creo que es un momento histórico que tiene unos ingredientes magníficos para el  género: un orgulloso imperio en decadencia humillado, todas las grandes potencias del momento, personajes muy dispares, guerra, fanatismo, injusticia, coraje. Y también la posibilidad de matices: desde la cómoda poltrona del siglo XXI , es difícil estar de acuerdo con las ideas reaccionaras y violentas de los bóxers y su apoyo a la corte manchú, pero resulta comprensible que los chinos se acabaran levantando ante el altanero comportamiento, propio de buitres despedazando carroña, de las grandes potencias del momento. Una viñeta de la época lo reflejaba muy bien: en el primer dibujo aparecía un chino sobre un europeo al que estaba a punto de acuchillar, se podía leer barbarie; en el segundo encontrábamos la imagen al revés,. con el europeo sobre el chino, su titulo era civilización."

Se nota que el autor conoce el periodo, y también que a pesar de haber introducido muchísima ficción y de haber desvirtuado algunos hechos, ha sido muy respetuoso con la historia, hay personajes de muchisimas  nacionalidades con intereses distintos en China y aunque muchos son fruto de la imaginación del autor, otros existieron en realidad, y tuvieron las aficiones que se les imputan, aunque no por ello sean culpables de nada.

También los españoles tenemos nuestro reflejo en esta historia, de la mano de Ramón Alvarez sobre todo, porque a Luis Garrea lo perdemos pronto y no en muy buenas condiciones. Para mi ha sido imposible quitarme de la mente al típico pícaro español que tenía que ingeniárselas para alimentarse y seguir con vida. En este caso Ramón parece tener más vidas que un gato, y  más suerte que un ganador de la primitiva. Es imposible no sentir aprecio por este chico algo patoso que siempre salva el tipo de milagro, en un país en el que no conoce la lengua, y cuya forma de actuar no comprende.

Temas

Los temas de esta novela son múltiples y todos ellos bien hilvanados, hasta el punto de no poder dejar de leer.

Por un lado están las grandes potencias que se han repartido China, sacando provecho de su situación y dejando a la emperatriz en una situación cada vez  penosa. Por otro lado tenemos a la corte manchú viviendo en la opulencia de espaldas al pueblo, que cargado de tasas no puede si no malvivir. En ese caldo de cultivo los campesinos del norte de China se rebelan, provocan un alzamiento para intentar destruir a los diablos colorados, los extranjeros, que se reparten sus tierras, ocupan sus templos, convierten al cristianismo a sus compatriotas y esquilman sus antigüedades.

Estos campesinos chinos conocedores de las artes marciales,  de la tradición y leyendas chinas, apoyan a la corte manchú y exigen la salida de los extranjeros de su país, no se entiende muy bien el apoyo que le brindan a la dinastía Qing, supongo que lo consideran un mal menor. Despectivamente son llamados bóxers aunque ellos prefieren llamarse los Puños Armoniosos y Justos.

La crueldad de estos grupos no tiene parangón y la frivolidad con la que la emperatriz decide apoyarlos como mal menor es el colmo de la hipocresia, porque esta los desprecia, pero si arriesgan sus vidas para que se mantenga la corte y sus tradiciones adelante.

Otro tema son los abusos de estas potencias, los territorios que se anexionaban, como trataban a los chinos, lo poco respetuosos que eran con unas costumbres que ellos no entendían, ni se esforzaban por entender. El robo de antigüedades que no siempre eran achacables a los occidentales, pero eran los que más tenían que ganar con ello.

El amor, nos encontramos varias historias de amor, todas ellas bien estructuradas, y también la lealtad que mantenía unidos a hombres muy distintos entre sí, hombres que en muchos momentos no se soportaban y que emprendían gestas en las que arriesgaban sus propias vidas. Y también al mismo tiempo odios y rencillas, la lucha por una mujer y la traición.

Todo ello aderezado por las múltiples aventuras que viven un grupo de lo más dispar, en una misión encubierta, en la que se van destapando los secretos que cada uno de ellos lleva consigo como si fuera una mochila. Al tiempo que nos encontramos con una novela muy visual, en ocasiones se me venía a la cabeza Águila roja, sobre todo cuando tenían que salir por una ventana, andar por el tejado, o caían para romperse todos los huesos del cuerpo y todavía podían maltrechos continuar la aventura.

Abrir el libro es entrar en un mundo muy distinto al nuestro, un mundo que las grandes potencias quisieron occidentalizar de muchas maneras, es vivir una aventura tras otra, seguir a un grupo heterogeneo en una misión que les puede acarrear la muerte. Es participar en cada una de las huidas que emprenden, es salvar el cuello de milagro, es un sinvivir con el libro pegado a las manos sin poderlo soltar, porque los personajes se te han metido en el corazón, aunque ninguno sea trigo limpio, aunque guarden un sinfín de secretos. Necesitamos saber que será de ellos. Si los occidentales podrán parar a los boxers, si la emperatriz conseguirá sus propósitos, si  todos y cada uno de los distintos personajes conseguirán sus metas.

Los personajes

No voy a hacer un análisis pormenorizado de ellos, porque le quitaría atractivo a esta historia, porque cada uno aparece cuando tiene que hacerlo, se presenta en una situación distinta, nos va enseñando de su carácter lo que le conviene y se guarda para si lo que cree que puede acarrearle problemas o debilitarlo frente a los demás. Y la careta en un momento dado cae, y este se muestra cual es y si ello fuera analizado al final destriparía la novela de tal forma que no habría ningún aliciente para un futuro lector.

Voy a hacer comentarios generales, ligeras pinceladas para conseguir picar vuestra curiosidad hacía esta historia, guardando un as en la manga, que solo vas a poder desvelar si te adentras en la China de 1900. David Yagüe ha construido personajes complejos desde el punto de vista sicológico, personajes que en ocasiones traspasan el papel, dotados de vida, me atrevo incluso a pensar que en algunos momentos habrán elegido su destino.

Pero si psicológicamente están bien dibujados, hay algunos que lo están también físicamente y nos atraen o nos repelen por esas descripciones y sus actos, hay que incluso que llega a redimirse en el transcurso de la historia. Dotada de una imaginación portentosa no me ha sido difícil imaginar a todos y cada uno de los personajes.

La ambientación

La novela transcurre en China, pero está es muy grande y los personajes no se mueven siempre por los mismos enclaves. He sido capaz de pasear con David por el barrio de las Legaciones, he entrado en la Ciudad Prohibida, me he paseado por el palacio imperial.

He atravesado caminos, dormido en el bosque, espoleado caballos, y huido de una aldea, para meterme en una ciudad en la que me esperaba más de lo mismo, he paseado de incógnito por sus calles, he sentido el miedo de la población autóctona, y el de los extranjeros y todo gracias a la pluma del autor que me ha vuelto a sorprender gratamente, me ha mostrado una faceta distinta de su forma de narrar y he de reconocer que me ha gustado.

Conclusión

Ya lo he comentado al principio y a lo largo de toda la opinión, esta novela me ha enamorado, no soy muy aficionada a las novelas de aventuras, estas tuvieron su momento en mi adolescencia, sin embargo he disfrutado tanto esta historia que no me queda más remedio que recomendárosla. Los días que la tengáis entre manos os adentrareis en una cultura distinta y convivireis con occidentales y orientales de lo más variopinto.

Desarrollaréis filias y fobias. Ningún personaje de esta novela os resultará indiferente porque todos ellos están cargados de matices, secretos, luces y sombras que os tendrán en vilo durante toda la lectura, y cuando finalmente cerréis el libro se quedaran en vuestro corazón por derecho propio.


Retos

25 españoles

marzo: mes de la familia

20 comentarios:

Manuela dijo...

Pues a pesar de tu recomendación lo voy a dejar pasar, no es un género que me atraiga demasiado y aunque de vez en cuando me gusta estoy en plan de apuntar lo menos libros posibles, a ver si así aligero un poco la lista de pendientes. Besos.

Xavier Beltrán dijo...

Aunque no suelo leer mucho acerca de los países orientales, de vez en cuando me gusta conquetear con esas culturas tan lejanas a la nuestra. Me apunto la novela para cuando me apetezca un buen libro de aventuras históricas.

Un besito.

Unknown dijo...

A mi mi se atrae mucho el mundo oriental. Las vivencias y la forma de vida es tan distinta que me atrae irremisiblemente aunque muchas veces me quedo sorprendida por la forma de plantear ciertos temas. De todas formas me suele pasar con autores también orientales que saben plasmar ese tipo de "vida". No es mi estilo de novela pero desarrollándose en ese escenario la tendré en cuenta.
Un saludo.

Angela Leon dijo...

pues yo sí me lo apunto. Conjuga el tema oriental que me gusta con las aventuras que yo sí las suelo disfrutar mucho.

Buena reseña.

Bs

LAKY dijo...

La tengo pendiente y mi intención era leerla este mes aunque se me ha complicado el mes y no sé ya si me dará tiempo
la otra novela del autor me gustó mucho y creo, por lo que cuentas, que también me gustará ésta
besos

Dess dijo...

No lo conocía aunque por ahora no me veo leyéndolo, apesar de que lo pones bastante bien
Besos!

Margari dijo...

No conocía este libro y me ha llamado mucho la atención. Me suele gustar la temática oriental así que me lo llevo bien apuntadito.
Besotes!!!

Marisa C dijo...

Me gusta conocer otras culturas a través de los libros y, sobre todo, algo tan lejano para mí como el oriente. Así que, gracias por tu sugerencia. Me lo apunto ya mismo. ;D. Abrazos.

Lourdes ILGR dijo...

Tiene buena pinta lo tendré en cuenta.

María dijo...

Tengo el libro y las ganas. Después de tu recomendación, más todavía.
¡Muchos besos!

David Gómez Hidalgo dijo...

ME encuentro entre querer y no querer. Los libros de aventuras tuvieron su momento y no sé si ahora los aprecio tanto como antes...Está claro que la reseña te lleva a leerlo, pero...ya te digo, tanto por leer y con la aventura apagada :)
Saludos

Shorby dijo...

Lo vi reseñado no hace mucho en otro blog y pinta bastante bien =)

Besotes

Ismael Cruceta dijo...

Tengo pendiente leerlo, a ver si me hago con él de alguna manera. Tu reseña es muy motivadora!
un beso!

Unknown dijo...

Muchísimas gracias Carmina. Pedazo de reseña, es muy emocionante leer que te ha gustado tanto. Un fuerte abrazo¡

Estefania dijo...

Ouch! No he leído ninguno de los tres...¡que desastre soy!
Besitos, Place of Dreams^^

Marisa G. dijo...

No me lo llevo. No me termina de convencer. Besos.

Kayena dijo...

Pues fíjate que a mi todo lo que huele a Oriente me gusta y creo que he disfrutado mucho con todas las novelas que he leído que transcurren en esos lares.

Con respecto a la reseña, es magnífica hasta el punto de que aún estando en "modo selectivo", tendré que agenciármela, porque seguro que disfruto con ella.

Un beso.

Izaskun dijo...

¡Novela de aventuras! Con tu reseña me queda claro que es ideal para desconectar y pasar un buen rato, así que ¡me la llevo!
Besos

Carla dijo...

Las novelas de aventuras no suelen ser un género en el que me prodigue. Si se me cruza no le diría que no, por la curiosidad que tu reseña me ha despertado, pero en principio no iré a por él.
Besos

Espigador dgital dijo...

La verdad es que hay más de un pícaro en la novela. Y no sólo es español. Muchos parecen salidos de la mano de Defoe no de la de Quevedo. Como James Liddle. Y es que David Yagüe ha sabido ir más allá de todos esos topicazos literarios españoles. Por eso hay que aplaudir su novela, leerla y recomendarla. Hace tiempo que nos la merecíamos. Ya era hora.
Os remito a la reseña de lanovelaantihistorica.wordpress.com para que podáis apreciar mejor ese punto de vista.